Solo los
tontos creen en las casualidades
JORGE LUIS BORGES
Una preocupación inevitable en las personas
pensantes es comprender la razón y causa de los
hechos y de las cosas. En la vida en general y en Astrología
en particular a menudo se nos ha enseñado de
manera dogmática y/o equivocada, con lo que resulta
necesario deshacerse de ese yugo para poder alcanzar
la verdad. El presente artículo no pretende ser
la última palabra en materia de la estructura
matemática de los aspectos astrológicos.
Modestamente, solo proponemos algunos motivos de reflexión
sobre un tema tan interesante y presentamos algunos
puntos de vista nuevos. Uno de ellos, que deseamos destacar
especialmente, es desde luego la vinculación
de los aspectos con los números primos, cosa
que no se había mencionado nunca antes. De esto
surge la noción sorprendente de indicador de
un aspecto, calculable mediante una expresión
matemática muy sencilla y hasta ahora desconocida.
Esto es una gran novedad pues en esta expresión
aparecen los factores primos del aspecto.
Nos condujeron a esta expresión una serie de
consideraciones sorprendentes y nuevas para nosotros.
Estas pertenecen un poco al campo de la numerología
aritmosófica, un poco a la teoría de números.
Estos dos campos no solo han estado siempre separados
sino además enfrentados entre sí.
Otra dificultad seria fue enfrentar las tonterías
y divagaciones en boga en materia de aspectos astrológicos.
Esto lo hemos hecho en base a la experiencia acumulada
a lo largo de más de cuatro décadas en
materia de interpretación y direcciones. Esta
experiencia nos enseñó entre otras muchas
cosas lo siguiente:
a)El quincuncio (150ï) no es un aspecto benéfico
(como se repite dogmática e irreflexivamente).
La experiencia lo muestra a las claras como un aspecto
decepcionante, de esperanzas fallidas y sueños
rotos en relación a personas, hechos y cosas.
Así lo hemos venido enseñando por años
en nuestros cursos desde mucho antes de elaborar la
nueva teoría que hoy presentamos. En cierta oportunidad
un astrólogo francés ya fallecido pretendía
convencernos de que el quincuncio es un aspecto favorable
pues es suma de dos favorables 150=120+30. Argumentos
falaces de este tipo son muy frecuentes. La réplica
nuestra no se hizo esperar. En ese caso- se le dijo-
tambien serían favorables la cuadratura y la
oposición pues 90=60+30 y 180=120 +60. En suma,
que el quincuncio es un aspecto con comienzo feliz y
un final desgraciado: los deseos no se cumplen. Los
desarrollos que aquí presentamos confirman totalmente
este punto de vista.
b) La sesquicuadratura es tambien un aspecto mal comprendido
y juzgado a la ligera. De hecho crea inicialmente situaciones
adversas y contratiempos desagradables pero estos evolucionan
favorablemente hacia estados mucho más favorables.
Con ligereza los astrólogos lo han juzgado como
desfavorable por considerar solo el estado inicial de
los hechos pero sin reparar en la marcha posterior de
estos. Esto hace necesario destacar el carácter
dinámico de este aspecto. En suma, la sesquicuadratura
es un aspecto con comienzo desgraciado y final feliz.
Per asperam ad astram decían bien los romanos...
En otra oportunidad nos ocuparemos de la no conmutatividad
de los aspectos, insistiendo sobre una idea valiosa
del francés Gerson-Lacroix.
c) Se hallan en boga una serie de aspectos que son
pura fantasía de autores modernos y no pertenecen
en modo alguno a la tradición astrológica.
Entre ellos mencionaremos al nonil (40Ò) y al
insólito septil (51Ò26 = 360/7),
este último difundido principalmente por astrólogos
estadounidenses. Puestos a prueba largamente en interpretación
y direcciones ambos han probado ser totalmente ineficaces.
Los mencionamos aquí solo para evitar que se
los tome en serio a ellos y a sus cultores.
Por supuesto que las afirmaciones anteriores arriesgan
provocar la gritería de los beocios. Pero vale
la pena correr el albur ya que los mencionados son hechos
sólidamente comprobados a nivel experimental.
Contra este tipo de comprobaciones no hay mito ni dogma
que pueda resistirse. Sería larga la lista de
las teorías astrológicas que sobreviven
exclusivamente por la costumbre y tontería de
unos y la mala fe de otros...Esto acabará solo
cuando se proceda a pasar tanta afirmación dogmática
por el tamiz de la experiencia. La sugerencia más
saludable es siempre no creer nada a ciegas sino comprobar
por uno mismo.
Comencemos nuestro análisis mencionando que
un aspecto, de acuerdo a la tradición astrológica
necesariamente constará de un número entero
de grados comprendido entre 0Ò y 180Ò.
Ahora bien, podemos factorizar en primos a 180 como
sigue 180=2²3²5=2x2x3x3x5 (Recordar que los
números primos son aquellos números enteros
positivos solamente divisibles en forma exacta por si
mismos y por la unidad. La sucesión infinita
de números primos comienza con 2, 3, 5, 7, 11,
13, 17, 19,... Esto será muy importante en lo
que sigue como tambien recordar que solo es posible
factorizar a un número en factores primos de
una sola manera. Recuerdese además que el número
1 no es ni primo ni compuesto).
A partir de la descomposición en primos de
180 podemos facilmente deducir que el número
de divisores de 180 incluyendo al 1 y al mismo 180 es
d(180) = (2+1)(2+1)(1+1) = 18 (porque?) . Si a esto
le sumamos 1 (para incluir en las escalas o tablas al
CERO (ya veremos la razón luego) obtenemos 19
que es un número primo.
Es fácil convencerse que la afirmación
anterior es correcta. Los divisores de 180 son 1, 2,
3, 4, 5, 6. 9. 10, 12, 15, 18, 20, 30, 36, 45, 60, 90,
180. De estos divisores nos interesan especialmente
30 y 45. Obtenemos lo siguiente:
45x0=0
|
30x0=0
|
45x1=45
|
30x1=30
|
45x2=90
|
30x2=60
|
45x3=135
|
30x3=90
|
45x4=180
|
30x4=120
|
|
30x5=150
|
|
30x6=180
|
Está claro que en las tablas anteriores figuran
todos los aspectos tradicionales de la Astrología
y solo ellos. Pero hay un detalle digno de ser observado
y es que en la primera tabla hay cinco filas y en la
segunda siete. Obviamente 5+7=12, número de signos
del Zodíaco. Tanto 5 como 7 son primos. Pero
la cosa vá mucho más lejos. Podríamos
construir tablas análogas para cada uno de los
divisores de 180. De estas tablas solo interesan cuatro
adicionales por razones que veremos luego.
180x0=0
|
18x0=0
|
15x0=0
|
180x1=180
|
18x1=18
|
15x1=15
|
|
18x2=36
|
15x2=30
|
|
18x3=54
|
15x3=45
|
|
18x4=72
|
15x4=60
|
90x0=0
|
18x5=90
|
15x5=75
|
90x1=90
|
18x6=108
|
15x6=90
|
90x2=180
|
18x7=126
|
15x7=105
|
|
18x8=144
|
15x8=120
|
|
18x9=162
|
15x9=135
|
|
18x10=180
|
15x10=150
|
|
|
15x11=165
|
|
|
15x12=180
|
Nótese cuidadosamente que los números
de filas del total de las cinco tablas anteriores son
5, 7, 2, 3, 11 y 13. Estos no son otra cosa que los
primeros seis términos de la sucesión
de los números primos, lo que nos dió
la clave para lo que sigue. A esta altura ya era claro
que los números primos estaban profundamente
involucrados en los aspectos astrológicos pero
aún no sospechábamos en cuan grande medida
esto era cierto. Por lo pronto en las tablas anteriores
han aparecido todos los aspectos clásicos o neo-clásicos,
incluyendo el Reichelt o vigintil (18ï), el de
Kepler (108ï), el quintil ( Q 72ï), el biquintil
(144Ò) , el decil (36Ò) y algunos otros
que merecen ser investigados en el futuro. Pero queda
por explicar por cual razón de los dieciocho
divisores de 180 solo hemos considerado las tablas de
seis de ellos. Las tablas de múltiplos del 1
y 3 han sido excluídas por la sencilla razón
de que conducirían a una multiplicidad inmanejable
de aspectos. Sin embargo esas tablas tienen respectivamente
181 y 61 términos o filas es decir números
primos. El número de elementos de la tabla del
2 es 91=7x13 o sea no es primo. La tabla del 4 es simplemente
un subconjunto de la tabla del 2. La tabla del 5 (primo)
tiene 37 términos, otra vez un número
primo. Las del 10, 20 y 30 son subconjuntos de la del
5 y la del 12 un subconjunto de las del 2 y 4.
Es lógico que así suceda con todos los
divisores que no son ellos mismos números primos,
por ejemplo las del 6 y 36. Lo interesante es que las
seis tablas consignadas no corresponden ninguna de ellas
a números primos y sin embargo el número
total de términos de cada una es primo. Este
argumento heurístico fue el que nos condujo al
indicador de aspectos que pronto definiremos (al ponerse
de manifiesto lo plausible de una vinculación
entre aspectos astrológicos y números
primos).
EL INDICADOR DE ASPECTOS
Tras lo anterior se hizo evidente por donde había
que buscar. El indicador de aspectos que proponemos
se construye como sigue. Se descompone el aspecto AÒ
(con A entero positivo) en factores primos y se define
el indicador I(A) como la suma de esos factores primos
contado cada uno con su orden de multiplicidad. Si el
indicador es par el aspecto es benéfico o positivo.
Si es impar es maléfico. Hacemos aquí
por definición y/o convención I(0)=I(1)=0.
Así por ejemplo como A= 120=2x2x2x3x5 tenemos
que I(A)=2+2+2+3+5=14, par lo que al ser número
par corresponde a un aspecto benéfico. Consignaremos
los aspectos clásicos y sus indicadores en una
tabla pero antes debemos resolver el problema de la
conjunción. Como es sabido y la experiencia demuestra
la conjunción puede ser benéfica o maléfica.
Pero este aspecto es el único que puede ser expresado
de dos maneras diferentes ya que 0Ò=360Ò
y tenemos I(0)=0 , I(360)=2+2+2+3+3+5=17. El primer
valor es benéfico, el segundo es maléfico
y el problema queda resuelto. Tenemos en consecuencia
para los aspectos clásicos:
A |
I(A) |
0 |
I(0)=0
I(360)=17 |
30=2x3x5 |
10 |
45=3x3x5 |
11 |
60=2x2x3x5 |
12 |
90=2x3x3x5 |
13
|
120=2x2x2x3x5 |
14 |
135=3x3x3x5 |
14 |
150=2x3x5x5 |
15 |
180=2x2x3x3x5 |
15 |
Bien entendido, lo que resulta aquí esencial
no es el valor numérico del indicador sino única
y exclusivamente su paridad. Vale la pena señalar
esto pues no faltará quien pretenda que según
estos desarrollos la sesquicuadratura es tán
benéfica como el trígono, lo que es falso.
Analizando ahora la circunferencia completa 360=2x2x2x3x3x5
vemos que los dos aspectos problemáticos (quincuncio
y sesquicuadratura) señalados al principio son
los únicos que no dividen exactamente a 360Ò.
, Como hemos visto estos dos aspectos son de naturaleza
dinámica, señalando situaciones que varían
al transcurrir el tiempo.
Veamos ahora a los aspectos neoclásicos, los
que son en algunos casos más que discutibles
en cuanto si poseen valor real.
A |
I(A) |
Reichelt o vigintil
18=2x3x3 |
8 |
Decil
36=2x2x3x3 |
10 |
Quintil
72=2x2x2x3x3 |
12 |
Kepler 108=2x2x3x3x3 |
13 |
Biquintil 144=2x2x2x2x3x3
|
14 |
|